Hoy empieza la mejor Semana Grande de la historia. Una Semana Grande más grande que nunca, con más actividades y conciertos y, sobre todo, una Semana Grande para todos los públicos y todos los gustos.
Empieza la Semana Grande que Gijón merece. Empiezan las fiestas de una ciudad grande.
Nada mejor para este inicio que un pregón de lujo, el que a continuación escucharemos del periodista José Ángel Abad.
José Ángel es muchas cosas. Es la persona que ha puesto imagen y voz a alguno de los acontecimientos más importantes de este primer cuarto de siglo, es un periodista de altura y es un corresponsal exquisito. Pero si algo define a José Ángel Abad sobre todas las cosas, es ser un gijonés profundamente orgulloso de sus raíces.
No hay nada más de Gijón que el orgullo por ser lo que somos, por formar parte de una ciudad libre, brillante y acogedora. No hay nada más gijonés que la emoción que sentimos al hablar de Gijón.
Tenemos la suerte de haber nacido en la mejor ciudad del mundo y la responsabilidad de continuar haciéndola crecer.
¡Feliz Semana Grande!
Pregón de la Semana Grande de Gijón 2024
Gijoneses, buenas tardes.
Os traigo lo mejor que os puede traer un hombre como yo. Os traigo buenas noticias.
En realidad, os traigo muy buenas noticias.
Porque acabo de ver el programa de la Semana Grande y vais a tener, vamos a tener todos juntos, la mejor Semanona de nuestra vida y vamos a empezar a celebrarlo de inmediato.
Pero también porque, dejadme deciros hoy, que veo para esta ciudad oportunidades que pueden, deben y van a traer buenos tiempos para nuestro querido Gijón y para los gijoneses… si las aprovechamos.
Enseguida vemos por qué y cómo. Eso también lo podemos celebrar hoy. Pero permitidme antes…
Querida Alcaldesa, autoridades, gijoneses, asturianos, amigos y amigas de todos sitios que estáis hoy con nosotros…
…este año el pregón os lo da un periodista, corresponsal en Nueva York, pero ante todo os lo da… uno de los nuestros, un guaje de Gijón, del barrio del Natahoyo.
Estar aquí en Gijón con vosotros es un honor que abrazo con mucha emoción pero también con el mismo espíritu con el que cada día intento contaros las noticias en Antena 3, desde hace 31 años: hablándoos al corazón y a la razón, con sinceridad, claridad, honestidad, con compromiso con la verdad, persiguiéndola.
Y de la manera más rápida posible…
…porque lo más importante es empezar a divertirse en nuestra Semana Grande de Gijón.
Veréis, cuando la Alcaldesa me invitó a dar el pregón…
…voy a decirlo como fue, porque tenemos una alcaldesa amable, simpática, cálida, inteligente, generosa…
…me dijo que ya lo había pensado hace tiempo y, además, añadió, “tú ya estás acostumbrado a hablar en público…”
Y yo pensé, Dios mío, si yo a lo único a lo que le he hablado en mi vida es a una cámara!
Así que pensé, mejor te buscas una disculpa y teniendo de por medio a Trump y Biden -bueno a Biden ya casi no porque está camino a Vallesol-, ahora a Kamala… si la cosa no cambió ya, pues con todo el follón de las noticias no sería difícil dejarlo pasar.
Pero siendo gijonés uno sabe también ser agradecido, como somos en esta ciudad.
Y comprometido.
Y por eso estoy aquí, porque hay cosas en la vida que no se pueden dejar pasar.
Estar hoy con vosotros, es una de ellas…
… estar aquí con mi gente,
con quienes me habéis visto crecer,
con quienes me habéis ayudado a nacer en Cabueñes -como tantos de quienes estamos aquí.
Cómo no iba yo a estar hoy con quienes de niños, de guajes, habéis jugado conmigo alguna vez en la playa, como todos los niños hemos jugado en Gijón…
O en el Parque Isabel la Católica.
Cómo no iba yo a estar hoy aquí con quienes me habéis enseñado a leer y a escribir en nuestros colegios -el mío era el Sagrado Corazón- y con quienes me habéis formado en nuestros institutos -el mío era el Padre Feijoo.
Cómo no iba yo a estar hoy con quienes me llevabais en autobús, en el 12, el 10, el 5, el 7, en el micro, ¿os acordáis del micro?… con quienes me llevabais al Jardín o al Oasis, o al Molinón a ver a nuestro querido Sporting.
Cómo no iba a estar yo con quienes compartía prau en la romería en Peón, Deva, Arroes.
O en los merenderos… o en Los Maizales, a ver quién no comió tortilla en los Maizales…. que no hay banquete mejor en el mundo.
Cómo no estar hoy con quienes cuidáis los cementerios donde están mis abuelos.
Cómo no estar hoy con quienes vais alguna vez al Mercado del Sur, donde trabajó mi bisabuela.
Cómo no estar hoy con quienes os esforzáis en sacar Gijón adelante con el esfuerzo del trabajo diario en la administración, el comercio, el turismo, en las tiendas de la ciudad, en la industria… como mi padre tantos años en Ensidesa, como tantos miles que vinieron a esta ciudad a salir adelante y a sacarla adelante como habéis hecho.
Cómo no estar, en suma, con quienes he compartido los mejores recuerdos de mi vida y con quienes siempre quiero volver a estar, que sois vosotros.
Por eso, es mi obligación y oportunidad de decir lo más importante que se puede decir.
Este es el día, el lugar y el momento. Y eso es: GRACIAS.
Gracias por darme una vida, una personalidad, unas memorias, unas posibilidades de las que estar orgulloso y que son de lo mejor que se puede tener en este mundo.
Nosotros tenemos la inmensa suerte de ser vecinos de una ciudad de la que estar muy orgullosos…
…asturiana, abierta, generosa, desenfadada, moderna, directa, nada hipócrita y muy trabajadora. Aquí se presume de trabajar, de ayudar y de tener palabra.
Y hay mucho más por lo que sentirse orgulloso.
Mirad, ahí al lado, cogemos la calle Corrida, llegamos a la plaza del Seis de Agosto y allí tuvo durante años un puesto de helados mi madre.
Muchos de vosotros le habéis comprado helados -y tuvo otro al final del muelle junto al Habana.
Y es probable que me lo hayáis comprado a mí también… aunque mi madre no me dejaba atender… “qué va a decir la gente que te ve en la tele y luego aquí vendiendo helaos”, me reñí.
Y yo le decía, “mamá, la gente de Gijón respeta el trabajo, mucho!”
La Plaza del Seis de Agosto se llama así porque un seis de agosto Jovellanos regresó a Gijón y se le dedicó después esta plaza donde tenemos en letras bien grandes unas palabras que en su día escribió Jovellanos y que definen entonces, ahora y siempre el espíritu de este Gijón y que son palabras que a mí me hacen especialmente orgulloso de ser parte de esa ciudad.
Dicen, “¿por ventura es la sociedad otra cosa que una gran compañía, en que cada uno pone sus fuerzas y sus luces, y las consagra al bien de los demás?”
Ese espíritu de compromiso, unión y solidaridad es algo que nos define, es algo que define a Gijón. Y es algo muy grande.
Nosotros, la familia gijonesa, compartimos eso y, además, lo hacemos de cierta manera, con un sentido de compromiso y de respeto, que es algo muy enraizado en esta ciudad: que todo el mundo merece el mismo trato, la misma consideración, las mismas oportunidades.
Otra razón por la que estar orgullosos es que esta ciudad, es inmensamente acogedora con los que vienen de fuera.
Y para ser acogedor hay que tener un corazón enorme.
Yo sé que Gijón es una ciudad muy acogedora porque acogió, por ejemplo, a mi padre.
No hablo de oídas.
Como sabéis, conozco muy bien Nueva York. He estado veintiún años en Nueva York.
Por eso, tampoco hablo de oídas cuando digo que…
Gijón es, como Nueva York, una ciudad que no te pregunta de dónde vienes, sino adónde vas.
Gijón es, como Nueva York, una ciudad que no mira atrás, sino adelante,
Gijón es, como Nueva York, una ciudad que no te obliga a renunciar a nada para ser uno más en ella,
Gijón es, como Nueva York, una ciudad a la que no le importa qué has hecho, sino qué vienes a hacer.
Gijón es, como Nueva York, una ciudad que te invita a participar, a vivir, no a quedarte arrinconado como si no pudieras pertenecier a ella.
Gijón es como Nueva York, pero con menos torres…. Y precisamente por eso todo más guapo!
No os preocupéis por las torres.
El mundo está lleno de torres y aquí ya tenemos la más guapa que es la de la Universidad Laboral.
Y la del Reloj!
Gijón, además, como mi familia, siempre me ha protegido. Lo digo por lo siguiente.
Lo que he aprendido aquí en nuestros colegios y la forma de relacionarme con el mundo que he aprendido en estas calles nunca me ha hecho sentirme de menos cuando estoy a codazos en la Casa Blanca o peleando con los de Harvard, Silicon Valley, la NASA, los de los Oscars o quien sea.
Ojo, ahí hay talento y futuro. Pero aquí también!!!
Más importante, la forma de ver el mundo con que he salido de aquí de donde estamos, la mía y la vuestra, nuestra forma de respetar a los demás, de aprender de ellos y de ayudar cuando es posible, la decencia, el buen corazón, le dignidad que Gijón me ha dado siempre me ha parecido un equipaje perfecto para ir por la vida, como gijonés, como corresponsal y como ciudadano -que es una palabra maravillosa.
Por eso, alcaldesa, muchas gracias por la invitación y por permitirme celebrar las cosas por las que debemos estar orgullosos un día como hoy.
También tenemos retos por delante. Permitidme…
Mirad, aquí detrás más allá de la orilla de nuestro Cantábrico, aunque a primera vista no lo parezca, el mundo está pasando por un cambio vertiginoso.
Estamos en el amanecer de una nueva era. Nada va a ser igual en muy poco tiempo.
En los próximos cinco años va a haber más cambios aún que en los cinco anteriores, y en los próximos diez más que en los diez de antes.
Los cambios políticos y estratégicos que va a haber en el mundo muy rápido, con Trump o sin Trump, la revolución con la inteligencia artificial y la nueva realidad de cambio climático inexorable van a hacer que la forma en que aprendemos y enseñamos, el comercio que vamos a tener, la forma en que nos vamos relacionar, en que nos conocemos y trabajamos y las guerras que vamos a tener o la forma en que nos vamos a divertir, todo va a ser diferente.
Mi trabajo, como sabéis, es contar lo que ocurre cada día.
Y esto que os voy a decir ahora os lo cuento con la misma sinceridad y, francamente, certeza:
Las ciudades y ciudadanos con capacidad de abrirse al mundo, de acoger, de colaborar, de aprender, de enseñar, de integrar, las ciudades que miren adelante más que hacia atrás, los ciudadanos que se fijen más en lo que les une que en lo que les separa, van a triunfar en esa nueva era.
Van a triunfar quienes apuesten por el talento y quienes miren a su alrededor, a izquierda, a derecha y al centro, con respeto y con espíritu de colaboración.
Lo que se dice sobre las personas también vale para las ciudades: si quieres llegar rápido, vete solo. Pero si quieres llegar lejos, vete en equipo.
Por eso también estoy orgulloso de ser gijonés y soy optimista sobre Gijón: porque tenemos lo más importante, el carácter y la vocación de abrazar el futuro como hemos hecho tantas veces.
Por eso, también, cuando los americanos me dicen que vienen a Europa y me preguntan adónde tienen que ir yo les digo…. a Gijón!
Y cuando me preguntan dónde está la playa más guapa del mundo, yo qué les digo? En Gijón!
Y cuando me preguntan dónde está la gente más generosa, buena, acogedora de España les digo… en Gijón!
Y cuando me preguntan dónde se come mejor en el mundo yo les digo… en Gijón!
Y cuando me preguntan dónde está la villa marinera con la mejor Semana Grande del mundo yo les digo…
…En Gijón, hoy y siempre, así que, gijoneses, queda inaugurada nuestra Semana Grande, vamos a celebrarla JUNTOS!!!!
Puxa Gijón, Puxa Asturias!
Muchas gracias y hasta siempre!
