Creo firmemente que la Universidad tiene que reivindicar más que nunca su papel básico en nuestra sociedad y su rigor e integridad, y actividades como el Foro de Empleo ponen de manifiesto su compromiso con el progreso y el bienestar de todos, especialmente de los jóvenes a los que prepara para hacer frente al futuro.
La complicidad entre el mundo universitario y el tejido productivo siempre ha sido esencial para articular un modelo sostenible de empleo que de respuesta a las demandas de los jóvenes que llegan al mercado laboral. Esta receta no es propia; la vienen aplicando desde hace décadas las primeras economías del mundo, con resultados a la vista de todos.
Tras una durísima crisis que les ha afectado profundamente, las Administraciones públicas tenemos el deber de centrar nuestros esfuerzos en reducir las dramáticas tasas de paro juvenil, y así lo estamos haciendo. Esta generación, que ahora reclama su momento, no ha conocido prácticamente otro contexto que no sea el de crisis: en casi todos los sectores había crisis. Ha llegado el momento de cambiar ese contexto.
Se les atribuye ser la generación más preparada de la historia, mientras que al mismo se les advierte de que pueden ser la primera en vivir peor que sus padres. Mensajes todos ellos pesimistas que no se corresponden con su talento, con su capacidad de hacer frente a los retos y con su firme intención de superarlos, como demuestran con su asistencia a foros como éste y su presencia, activa y precoz, en prácticamente todos los ámbitos de la sociedad civil. Lo hemos dicho más veces, pero es necesario repetirlo.
Desde el Ayuntamiento de Gijón hemos apostado con firmeza por los jóvenes; porque no merecen menos, y porque es lo mejor que podemos hacer para construir un futuro mejor, un futuro que no existe sin ellos. Con iniciativas como ésta, en colaboración con la Universidad de Oviedo, pero también con programas de empleo, orientación y formación llevados a cabo por la Agencia Local de Promoción Económica y de Empleo.
Son políticas que requieren de voluntad, de impulso y de recursos, pero que ya están dando sus frutos, revirtiendo una tendencia iniciada durante la crisis en la tasa de desempleo de menores de 30 años. Con las Agencias de Activación Juvenil y de Colocación; mediante Convenios como el SUMA TALENTO que tenemos, precisamente, con la Universidad de Oviedo; con Ayudas a la contratación por cuenta ajena; y con planes en colaboración con otras Administraciones, como el de Primera Experiencia profesional con el Principado.
Se trata de una estrategia integral, que engarza con todos los ámbitos en los que actúa el Ayuntamiento. No puede ser de otra manera, porque el empleo es la primera prioridad del Gobierno local, del mismo modo que es la primera preocupación de los ciudadanos. En la creación de empleo entran desde la Milla del Conocimiento hasta el impulso a la creación de empresas; desde la renovación total de las infraestructuras de la ciudad hasta el apoyo a la innovación e investigación en todos los ámbitos. El empleo es el hilo conductor de nuestra labor porque, insisto, no podría ser de otra manera. Porque no podemos desperdiciar ni la más mínima parte del talento que tenemos entre manos, ni una oportunidad.
Y lo hacemos en un contexto muy complicado. Mientras en el municipio de Gijón y en la media de España la cifras de reducción del desempleo se corresponden con las afiliaciones a la seguridad social (es decir, el número de gente que deja de estar en las listas del paro se corresponde con las que empiezan a trabajar), en Asturias eso no ocurre. No se producen las altas suficientes en la Seguridad Social. Baja el desempleo, pero no se crean suficientes puestos de trabajo. En Gijón hemos conseguido frenar esa tendencia, pero Asturias necesita adoptar políticas de empleo más eficaces.
Es un camino que sólo llega a buen puerto cuando vamos todos juntos. Este foro es una muestra de ello. Como el acuerdo de concertación social Gijón Crece 2016-2019, que destinará 160 millones de euros a la creación de empleo en sus cuatro años de vigencia. Son muestras de que tanto los poderes públicos como las instituciones educativas, las organizaciones sindicales y el tejido empresarial estamos comprometidos con ello.
Ahora debemos seguir trabajando en esta misma senda, para mejorar el futuro inmediato y también el panorama a medio y largo plazo, creando estabilidad y confianza. Y lo vamos a hacer sabiendo que vosotros, que sois el centro de todo esto, vais a sacar el máximo provecho de todas estas iniciativas. Son para vosotros, y por eso os animo, como en años anteriores, a sacarles todo el partido posible. A no dejar pasar ninguna de las oportunidades que os brindemos, o que sepáis buscar por vosotros mismos (como sin duda hacéis). También que nos exijáis más, que nos exijáis lo mejor. De vosotros aprendemos, en vosotros nos fijamos para mejorar. Vuestra participación es fundamental para guiarnos en todo lo que hacemos en este campo.
Con optimismo, pero también con toda la preparación que se os ha brindado y que os habéis procurado, con todo el impulso que tenéis, con toda la ilusión que demostráis, no cabe duda de que el futuro es vuestro. Y, como ya hemos dicho en ocasiones anteriores: en todo lo que podamos ayudar para hacer realidad vuestros proyectos, aquí estaremos siempre.