El acto inaugural de la Feria Internacional del Muestras de Asturias abre las puertas al gran evento comercial, empresarial, social de la región. Un acontecimiento en el que se dan la mano instituciones, como el Principado, el Ayuntamiento de Gijón y la Cámara de Comercio, con centenares de agentes públicos privados, para presentar entre todos una oferta de excelencia. En los stands está lo que somos los asturianos, lo que sabemos hacer, lo que trabajamos. Nuestra valía, nuestra ambición, el producto de nuestra inteligencia y esfuerzo, la capacidad de asociarnos, de inventar, de mejorar, de innovar. Lo que somos capaces de vender y exportar. La riqueza que elaboramos a partir del medio natural en el que nos desenvolvemos.
El evento que hoy inauguramos se inserta en una tradición brillante que ha recorrido las más diversas coyunturas, épocas de vacas gordas y flacas, con gestores de perfiles distintos, en contextos políticos opuestos, y con las instituciones gobernadas por grupos y personas de diversas ideologías. Hay dos elementos esenciales para que acompañe el éxito a una Feria, las empresas que exponen sus productos y el público. Los dos respondieron a la convocatoria ferial desde la primera edición. 10.000 personas asistían diariamente a la Exposición Regional del año 1899. 700.000 visitantes acuden al recinto ferial, Luis Adaro, a lo largo de las últimas ediciones. Los gijoneses siempre se identificaron con la Feria de Muestras, y la orientación del evento hizo que toda Asturias entendiera que se trataba de un hito regional. Ninguna feria reúne a tanta gente en España como la Feria Internacional de Muestras de Asturias. Gijón lidera la Asturias industrial, comercial,trabajadora y competitiva. Por eso nació la Feria de Muestras en esta ciudad y de ahí el arraigo alcanzado. Hay proyectos sólidos que son el anticipo de un futuro mejor para Gijón. Me satisface enormemente hablar de ello, porque son el fruto de la colaboración entre Administraciones.Desde hace dos años, con la plasmación del nuevo mapa político en todas las instituciones españolas, defendí a ultranza la colaboración entre las fuerzas políticas. Los ciudadanos hablaron con su voto y no nos queda otro remedio que adaptarnos a una nueva realidad más plural que la anterior. Desde el equipo de gobierno municipal no hicimos otra cosa que dialogar y negociar con todos los grupos.Voy a repetirlo con suficiente contundencia: no se pueden establecer vetos. Si alguien queda fuera del consenso que sea por su propia voluntad. Los límites a los acuerdos vienen marcados por las leyes, el sentido común y el bienestar de los ciudadanos. Establecer vetos, a priori, significa bloqueo, paralización y pérdida de oportunidades. Con la política de vetos haríamos un flaco favor a las instituciones que representamos. El plan de vías y el metrotrén, las dos piezas del proyecto más transformador para Gijón desde el advenimiento de la democracia, estaban parados por incomprensiones mutuas. La crisis económica, con la pérdida de recursos para las Administraciones, era un obstáculo para realizar las nuevas inversiones. Es una realidad incontestable pero no lo explica todo, porque el proyecto ya había pinchado, previamente, por falta de voluntad política. 
En los últimos seis años sólo se había avanzado en una cuestión de diseño del proyecto, como es la centralización de la estación intermodal, tal como lo propuso el Ayuntamiento que presido. Hace algo más de un mes, el proyecto ha recobrado vida, al abandonar el Ministerio de Fomento la premisa de financiar todo el plan de vías con las plusvalías de los terrenos, y comprometer una inversión de 500 millones de euros que permitirá construir las infraestructuras pendientes y desarrollar todas las potencialidades del metrotrén. Si a los 500 millones comprometidos por el Gobierno se suman las plusvalías de las parcelas del solarón, o en caso de no poder obtenerlas, la financiación comprometida por el Principado y el Ayuntamiento de Gijón, nos encontramos con una suma total de 700 millones de euros que se invertirán en el plan de vías y el metrotrén en los próximos años.La mayor inversión en Asturias tras la crisis económica.He criticado muchas veces la actuación del Gobierno con el plan de vías y el metrotrén. No me arrepiento de haberlo hecho, ya que Gijón recibía un trato discriminatorio con respecto a otras ciudades en que se ejecutaban operaciones similares de llegada del ferrocarril a la trama urbana.Hoy me satisface decir lo contrario. El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, ha presentado un plan que colma todas nuestras expectativas. El metrotrén va a suponer un cambio en la comunicación interna de Gijón, y un revulsivo para los tráficos de cercanías en nuestra región. La operación del levantamiento de vías va a quedar finalizada con una nueva traza urbana. Necesitábamos que desde el Ministerio de Fomento se mostrara compromiso con Gijón, y el plan presentado lo recoge.Por eso quiero agradecer la decisión del ministro Íñigo de la Serna al anunciar la inversión de 500 millones para desarrollar todas las potencialidades que encierran el plan de vías y el metrotrén. El Ministro entenderá que como alcaldesa estaré atenta a la realización del plan para que no se produzcan variaciones ni retrasos. Demasiados años de retrasos llevan ya acumulados el plan de vías y el metrotrén como para aumentar la tardanza.4
No se puede perder más tiempo. Hay que ser muy pragmáticos. Urge poner en funcionamiento el tramo del metrotrén que va de Viesques al Museo del Ferrocarril. Son más de dos kilómetros de túnel, con sus estaciones, cuya obra civil ya está concluida. En el año 2020 ya se puede poner ese tramo en servicio, lo que supondría una inyección de optimismo para los gijoneses, que han visto cómo las grandes obras públicas sufrían todo tipo de retrasos y problemas. En paralelo puede avanzar la tramitación administrativa de la prolongación Viesques-Cabueñes, con el estudio informativo, la información pública, el estudio de impacto ambiental, el proyecto y la licitación. Son dos actuaciones paralelas, en que la primera, Viesques-Museo del Ferrocarril, está en condiciones terminar mucho antes, debido a lo avanzado de la misma. 
La cooperación entre las administraciones es indispensable para que los proyectos avancen. También en el Ayuntamiento hemos apreciado un cambio muy positivo del Principado en la actuación del plan de vías. Con el nuevo consejero de Infraestructuras, Fernando Lastra, el Principado se suma al consenso entre Administraciones. Un completo acierto que es de justicia reconocer. En esta etapa se ha acentuado el carácter plural de las instituciones. Sólo desde la negociación y el acuerdo se puede avanzar. Hay razones para el optimismo, pese a los problemas. Y hay razones también para sentirse orgullosos de una ciudad que tiene las medidas municipales más avanzadas de España en materia de cohesión social. Gijón es una ciudad solidaria, a la vez que la principal locomotora económica de Asturias. Entre todos plantamos cara a la crisis, y estoy segura que los mejores años están por llegar. Espero que la 61 edición de la Feria Internacional de Muestras de Asturias sea un anticipo de todo ello.
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