Esta semana presentamos el proyecto ganador para la nueva Comisaria de la Policía Local en Gijón que estará ubicada junto a los Juzgados y la Comisaria de la Policía Nacional. La propuesta ganadora es «Pomares» de Serrano Suñer Arquitectura. Se trata de una necesidad prioritaria pues el actual edificio no cumple con la funcionalidad del trabajo y los vehículos policiales no entran en la Comisaría. No se trata de un capricho, sino de una necesidad.
Es una edificación llena de luz con 18 patios interiores que perforan el edificio introduciendo la vegetación, ventilación e iluminación natural consiguiendo una gran calidad espacial. El diseño inclusivo del edificio hace que la accesibilidad universal se respete en todos los espacios y usos.
El edificio se desarrolla en dos plantas sótano dedicadas a parking, dos plantas sobre rasante que configuran un basamento en el que se ubican los espacios de acceso al público así como la zona estancial de la Policía. Sobre este se eleva un volumen de 4 plantas donde se encuentran las oficinas de acceso restringido, el cual constituye el hito urbano que identifica el edificio.
Exteriormente dichas bandas generan zonas estanciales, zonas infantiles, zonas de ejercicios para mayores, etc.… intercalándolo con zona verdes ajardinadas y la plantación de arboles como tilos y pomares. Con los ejes transversales resuelve el parcelario exterior y las circulaciones interiores del edificio, optimizando el funcionamiento interno.
Para la organización de la intervención crea unas bandas paralelas al trazado ferroviario sobre las que se apoya la intervención exterior e interior.
La primera banda y la más próxima a la actual zona de vías resuelve por la fachada trasera el acceso rodado a cada una de las zonas que lo necesitan. Así en la planta baja y obedeciendo a dicha organización se ubican el acceso al parking y las zonas propias de la Policía, tales como la sala de pase de lista, sala polivalente…. Las siguientes bandas serian: Servicio de Trafico y regulación vial, Atestados, oficinas generales de acceso publico.
En planta primera se ubican las zonas privadas comunes tales como vestuarios, gimnasio, sala de descanso… Y en el bloque se desarrolla el programa de acceso restringido, jerarquizado en función de su afluencia como oficinas, emergencias, logística y jefatura. Dichas dependencias se organizan perpendicularmente a la fachada protegiéndose del sol mediante voladizo y lamas verticales. Esta fachada es la imagen más representativa del edificio y la que genera un carácter más institucional que permite identificarlo como un edificio publico.
Por su configuración volumétrica y sin posición con respecto a las edificaciones colindantes es necesario hablar de una quinta fachada, constituida por la cubierta del basamento en la que extiende la estrategia de parque en forma de jardín como la plaza de acceso.
En cuanto a la sostenibilidad, cabe reseñar los sistemas pasivos de ahorro de energía propios del diseño del edificio como los patios, la ventilación cruzada, la iluminación natural, las lamas que ayudan a disipar los rayos del sol y la cubierta vegetal que ayuda a reducir las perdidas térmicas. Todo ello se complementa con sistemas eficientes, tales como la geotermia, la economía del gasto de agua y la regulación lumínica.
La inversión total es de 9,5 millones de euros y las obras comenzarían a finales de 2018.