Esta mañana acudí al Centro de Seguridad Marítima Jovellanos, en Veranes, acompañada por el concejal Esteban Aparicio, donde se estaba impartiendo la formación a los Bomberos de Gijón, concretamente al turno 1, en el que se encuentra la única mujer del cuerpo de bomberos. El curso de hoy era sobre el manejo de contenedores flashover y lo impartía Pablo Vegarango.

El Flashover es la transición a un estado de participación de la superficie total en un incendio de materiales combustibles según la norma UNE-EN ISO 13943. Este fenómeno se mostró esta mañana con un simulador de Flashover compuesto por un conjunto de contenedores de metal dispuestos de diversas formas. Con este entrenamiento se recrearon estos y otros efectos para que los bomberos pongan en práctica distintas metodologías de extinción.

De vuelta al Ayuntamiento participé en una sesión plenaria, pero con una Corporación bien distinta, aunque no por ello menos exigente. Se trata del Consejo de la Infancia y Adolescencia de Gijón formado por 50 alumnos y alumnas. En el Pleno celebrado los escolares aprovecharon la ocasión para pedirnos mejoras en los parques de la ciudad, mayor promoción de las actividades deportivas y culturales, más carriles bici y un mayor control para prevenir el acoso escolar.

Muchas de ellas ya están en marcha, pero me comprometí a estudiarlas y todas y conseguir su viabilidad. En Alcaldía mantuve un encuentro con el alumno que ejercía de alcalde del Consejo, Pelayo.