Este fin de semana he visitado el Mercado del Ferrocarril, y lo puedo definir como un viaje en el tiempo. Al abrigo de las antiguas locomotoras del Museo del Ferrocarril, se disponen decenas de puestos donde podemos encontrar objetos de decoración, favorecedores collares, gafas de madera, flores, bolsos hechos con velas de barco o ropa con un toque vintage.
El Mercado del Ferrocarril abre los primeros fines de semana de cada mes de 11.00 a 20.30 horas y la entrada es gratuita. Este fin de semana celebraban su séptima edición y somos testigos de que es un éxito ya que estaba lleno de gente. Además, hay puestos dedicados a los más pequeños, con actividades como cuentacuentos, maquillaje de fantasía o talles de pintura.
Todo está cuidado al detalle y si tenemos suerte y hace buen día –como ocurrió el domingo- nada mejor que terminar la jornada de compras tomando algo al aire libre entre las vías. Bocadillos de jamón o pizzas caseras de pan unen la oferta culinaria al ritmo de la música en directo.
Una forma original y distinta de salir de compras entre locomotoras antiguas y vagones de la época, y ya de paso siempre se puede visitar alguna exposición del propio Museo, actualmente nos ofrecen la exposición de fotografía “Ferroviarios, la vida junto al tren” abierta hasta el 20 de julio.